La historia de la Yeguada Senillosa, empieza en la playa de la bahía de Roses, al adquirir en primer lugar unos caballos para pasear turistas, en nuestras instalaciones hoteleras. Como la temporada turística por todos es sabido que dura 3 o 4 meses, cuando se acababa el trabajo de pasear turistas, los caballos se soltaban desde otoño hasta la primavera, en el parque Els Aiguamolls de l’Emporda». Al año siguiente en primavera se volvían a reagrupar, esta vez todos las yeguas con sus rastras (crías).

Así fue, a grandes rasgos, como empezó nuestra afición por la cría de caballos. Esta etapa creemos recordar que duró unos 10 años. La siguiente etapa se produjo cuando compramos alrededor de 1977 cinco yeguas de origen de Maria Fernanda Escalera de la Escalera, pues fuimos amigos de Manolo Novales.

Hoy en día, después de 30 años de concursos morfológicos tenemos la piel más que curtida y hemos aprendido que los concursos morfológicos son sobre todo interesantísimos para comparar nuestros ejemplares con los de otras ganaderas, dándole una importancia relativa a los premios que se obtengan.

Nuestros caballos destacan por un carácter ejemplar y una funcionalidad única dentro de la raza.